martes, 6 de mayo de 2008

Volviendo a casa

Pues sí, todo se acaba. Ayer (creo que era ayer, porque con tanto cambio horario estoy descolocado) salí de Adelaida camino a casa... Pues no! El destino me había puesto otra parada técnica. Así que al final llego el miércoles a Madrid, después de meterme una panzada de horas de avión.
Y kilómetros, porque la tarjeta de millas de Iberia está que echa humo. De hecho ya no le carbura la banda magnética y hay que picarse los números a mano. Supongo que para cuando llegue a casa me estará esperando la versión plata.
Al final sí que he comprado el tubo ese por que el que soplan los aborígenes (Didgeridoo para los entendidos), pero en su versión no-funciona-pero-es-chulo. Tampoco es tan grande como los de verdad, así que lo llevo en el equipaje de mano. También he comprado unos "stubby holders" (venga, a google) para los chavales.
Bueno, os dejo que todavía me quedan tres vuelos por hacer. Nos vemos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ya tenemos ganas de pillarte por banda y de que nos cuentes todo eso que no se puede poner en un blog.
Que tengas buen viaje y nos vemos pronto!!.
Besos,
Ana y Rober