Como ya os conté en la entrada anterior, la cocina aquí es bastante curiosa. Al pasar unos días con Hanako y Sato he tenido ocasión de hacer varias comidas.La cena del otro día fue muy divertida (ahora que vuelvo a sentir las piernas) Nos sirvieron unos veinte platos, y no exagero, la lista de platos venía en un rollo de papel. E incluía delicias tales como un plato lleno de cabezas de pez (y era un pez MUY feo, del tamaño de una sardina), pescado crudo, sopas de vaya usted a saber y todo eso. El desayuno también fue bastante surrealista.
Ayer, que tuvimos que coger un tren bala comimos en el tren. Yo me pedí un paquete con la cara de Shin Chan en el que se veía un arrocito con ternera muy bueno. El caso es que el paquetito tenía una cuerda, que al tirar de ella activaba un mecanismo de auto-cocina al vapor. Menudo cachondeo con el paquete de Shin Chan hechando humo... Pero estaba muy bueno.
Y como despedidida ayer cenamos en un sitio en el que te ponen un chisme con agua hirviendo para que te hagas la ternera (cortada como en el carpaccio) y las verduritas. Y luego el agua que queda te la tomas con fideos. Cosa fina. En la foto me podeis ver tomando Shocho y trabajando con los palillos. En fin, todo se acaba y ahora me queda disfrutar de la comida de Lufthansa... Sayonara.
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